Misivas ocultas: El eterno ausente

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Hubo un tiempo en que una confidencia, una propuesta, una idea o una declaración amorosa era plasmada en lápiz y tinta, para luego ser pasada de mano en mano hasta que llegase a destinatario. Hoy todo eso ha cambiado: los celulares, internet y las nuevas tecnologías, hacen todo más efectivo, efímero y real.
Pero las cartas han hecho historia: Hay una carta detrás de la prematura muerte de Tutankamón, detrás de la derrota de los cántaros, de la pérdida del imperio español, de la emergencia del cubismo, o de un “quiero vale cuatro” inesperado.

Y este es también el instrumento, mediante el cual nuestro corresponsal en Alberdi ha mantenido comunicación con el Programa de los monos. Ya sabrá el oyente asiduo, la trayectoria radial de Silvio: Intento entrar al programa redactando reportajes, luego paseo sin rumbo por temas literarios o cinematográficos que tampoco nos cerraban del todo, hasta que por fin dió con….. quizás, sus ocultas intenciones. Todos conocemos que sus temas favoritos de un tiempo a esta parte son ignotos cantantes de blues o jazz, de la década del 30 del siglo pasado y delincuentes, de mayor o menor rango, pero todos abyectos y pocos dignos de homenaje.

Mutantes – La aventura imponderable

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Cuenta la leyenda que detrás de las fábulas y las novelas, hay un hecho real que las motiva. No hay escritura sin respaldo en lo sensible. Cada ser humano es esclavo de sus dichos, y no hay palabra libre de los fantasmas de su esclavo.

No hay creador que no deje traslucir sus defectos en la obra creada, no hay dios capaz de crear la perfección por más omnipotente que se considere.

Y un hombre descubrió la fragilidad de su omnipotencia el día en que mutó.

El sepulturero de Hendrix

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El sepulturero del cementerio de San Jerónimo viene siempre después de las siete de la tarde al puesto de flores de Natacha a tomarse unos mates y a escuchar la radio.

Cuando conversa exagera, deforma los hechos o directamente inventa historias descabelladas. Pero el tono en que refiere las cosas es tremendamente serio y a su cara de póker no se le filtra una grieta de duda o vacilación.

Con Natacha sabemos que miente, pero lo escuchamos igual y con mucho placer porque las historias son buenísimas.

La epifanía de Olivio Durán

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En los primeros años de su carrera el ahora prestigioso director de cine Olivio Durán, no era tenido en cuenta por casi nadie. Todas las puertas se le cerraban, y solo un pequeño cine-bar de la zona del Clínicas proyectaba sus desquiciados films.

El cine-bar estaba situado en la esquina de Santa Rosa y Chubut y era regenteado por el mítico Oso Panza (un ex recluso taciturno y amante del séptimo arte). Se sabe que tuvo un período de gloria a fines de los 80 y luego cerro para siempre.

En el cine-bar se realizaban tertulias de la más diversa índole. Son memorables todavía las lecturas del señor Kong en los “Viernes de poesía”; o los cuentos del Cronopio, los martes al mediodía, en su ciclo “Monstruos domésticos”. Y ni que hablar del Vengador Justicialista apareciendo los Sábados a la hora de las brujas con una máscara negra, capa flameante, y aliento a vodka.

Aristóbulo Pachevko – El mezquinador de la droga

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Aristóbulo – [aspira y tose] Agh, ¿por esto pagué doscientos cincuenta pesos?



Ése que está tirando un Cohiba a la basura, es Aristóbulo Pachevko, un hombre de edad media, carteludo y con poco gusto por el tabaco. Cerró la tapa del tacho de basura y agarró al azar un libro de su biblioteca, el cual se titulaba “El Capitalismo y el Complejo de Estocolmo desde una perspectiva marxista”.

Stairway to heaven

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Después de mucho tiempo de haberme pasado la vida encerrado entre las cuatro paredes y el trabajo, pude darme el lujo de asistir a mi viejo bar... emocionados, los mozos se peleaban por servirme la birra del retorno... sólo por verme de vuelta, porque nunca me sobró un centavo para una propina.

Pasa que yo me acostumbré a salir con lo justo, cosa que, si alguien me roba el bolso, se encuntre con la decepción de un montón de papeles escritos con una letra incomprensible (sí, es por eso que tengo una letra horrible). Es que hay mucha inseguridad, tal como lo dice el taxista... uno no puede salir a la calle con nada porque ya se convierte en objeto de deseo para los ratas y que te pueden tirar al piso, adornarte de piñas o volarte la cabeza de un tiro, pero ¡pará!

¿Qué onda?

¡Monos premiados! Argentores 2012

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Misivas ocultas: Billie Holiday I

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“…Estaba gorda la primera vez que la vimos, amplia, brillantemente hermosa, gorda. En aquel momento parecía que nunca volvería a ser una matrona, alguien real y sensible que llevaba dinero al banco, firmaba papeles, tenía cortinas a la medida, trajes colgados y zapatos por pares, dorados y plateados, blancos y negros, listos. Qué extraña y traicionera aparición era esa, una locura, porque nunca fue una mujer menos esposa o madre, menos apegada; ni siquiera podía parecer fácilmente una hija. Poco recordaba la lastimosa dulzura de una jovencita. No, ella era reluciente, sombría y solitaria, aunque desde luego nunca estaba sola, nunca. Señorial, siniestra y absolutamente decidida.

Los labios cremosos, los párpados pesados, el violento perfume –y en su voz eles y erres tropicales–. Su presencia, su canto, creaban una inflamada ansiedad. Largas uñas rojas y el sonido de las guitarras electrificadas. Ahí estaba una mujer que nunca había sido cristiana.

Mutantes – El semiólogo intuitivo

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Cuenta la leyenda que la lectura de los signos es una ciencia que requiere que la concentración y el conocimiento vayan a la par. Sólo algunos pocos seres humanos son capaces de relacionar un simple signo con una multiplicidad de posibilidades que determinen una realidad en el pasado, en el presente o en el futuro. Muchos de ellos se dedicaron a la adivinación o al fraude y lucraron con ello...

Pero un hombre ha decidido salir del negocio fraudulento... el día en que mutó.

Juro que no morí

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El rumor se inició el 12 de octubre de 1969, cuando un sujeto anónimo llamó a la emisora WKNR-FM en Dearborn (estado de Míchigan, en Estados Unidos), y anunció que Paul McCartney habría muerto.

Dos días después, el 14 de octubre de 1969, el periódico Michigan Daily publicó el artículo «McCartney está muerto: Nuevas pruebas salen a la luz», escrito por Fred LaBour y John Gray, también estudiantes de la Universidad de Míchigan.
La agencia de noticias United Press el 22 de octubre de 1969 desmiente el rumor. Para que no quedaran dudas, al mes siguiente la revista estadounidense LIFE publicó una entrevista con el músico en la que McCartney declaraba sin titubeos: “Juro que no morí…”
No es lo mismo no morirse que resucitar.

Si, como dijo Lennon, los Beatles son más populares que Jesús, entonces la revista LIFE es una entrega por fascículos del nuevo testamento.

Habla Siconarcópulus

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Hará unos cuantos años, en la esquina de Santa Rosa y Chubut, discutí con el escritor de Alberdi acerca de la propiedad del arte. Por supuesto él no sospechaba quién era yo, pero defendía con obstinación, el insensato, el triunfo final de la palabra anónima, y era del todo ajeno al concepto del plagio, para él sin duda menos literario que comercial.

Lo que no sospechaba, lo que no podía sospechar este hombre, es que el diálogo era profético. Unas horas después, cuando se apresuraba con su estuche de guitarra camino al Clínicas intentando eludir su destino, mis hombres lo interceptaron y le arrebataron todos sus escritos.

En ese momento, otro grupo entraba a su casa para no dejar rastro de algún papel que llevara su firma.

Sentí la victoria entre mis manos. Creí que el olvido se impondría al quemar su infame obra.

Y lamentablemente en estos días, que ya no están ni él ni sus papeles, labios anónimos repiten sus palabras hasta el cansancio.

Ese plagio me avergüenza y me destruye cada minuto que pasa.

Aristóbulo Pachevko – El imán de piñas

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Aristóbulo – ¡Adalberto! ¡Se acabó el papel!



Ése que está haciendo sus necesidades, es Aristóbulo Pachevko, un señor barbudo, con algunas canas y una irremediable pasión por leer en los sanitarios. Acababa de terminar una compilación de ensayos sobre “la ficcionalización de la vida de los muertos en las palabras en sus velorios” cuando se dio cuenta de que se había acabado el papel higiénico.

Guerra de comida

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Ayer, después de un día de verano apresurado que me obligó a poner mi camisa preferida en el lavarropas debido a que el sudor y el viento con tierra la convirtieron en una mezcla entre la ropa de Tarzán y un pantano, me senté a escribir en el patio de casa. Me preparé un trago de fernet, bien fuerte, no sólo por el sabor, sino porque agarré la costumbre de prepararlo fuerte para evitar que alguien me pida un trago, porque soy un tanto egoísta, sí, y si alguien se anima a tomar de ese mismo trago, con orgullo le convido, porque es alguien del palo. Así también, fumo puchos negros, porque en este mundo, si uno tiene puchos, se convierte en el pararrayos del mangueo.

Mutantes – El cuento feérico

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Cuenta la leyenda que los niños son capaces de dar vida ante la ausencia de otro ser para interactuar. Así como, ante la necesidad, un náufrago fue capaz de hablar con una pelota u otro con un tigre imaginario, las creaciones comienzan a adoptar características propias y reaccionan a estímulos de manera diferenciada y opositiva con su creador. De esta manera, los primeros humanos le respondieron a Jehová con un pecado, pero siempre dentro de un guión que los preexistía.

Sin embargo, un peluche se escapó de esta biblia semi-controlada... el día en que mutó.

Cantando en su propio funeral

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Generalmente la mayoría de los unplugged de MTV, fueron un recopilado de “Greatest Hits” de la banda de turno. El 18 de Noviembre de 1993 Nirvana optó por quebrar el concepto, y presentar más bien un recorrido por ellos mismos, es decir sus influencias, gustos personales, e incluso caprichos, otorgando una velada sincera y humana. En cuanto a la puesta en escena, una de las observaciones más comunes es la similitud del set con un velorio. Los lirios blancos, las velas negras, todo bajo una uniforme luz púrpura, a petición del propio Cobain.

Apenas cinco meses después, el viernes 8 de abril de 1994, el cuerpo sin vida de Cobain fue descubierto por un electricista en su casa de Seattle.

Cobain se voló la cabeza a si mismo y a toda una generación.

Paradójicamente en Noviembre de 1994 salio a la venta la presentación grabada un año atrás en MTV Unplugged, bajo el título de MTV Unplugged in New York.

Fue el disco del año. "Where Did You Sleep Last Night?", es la última pregunta que se hace Kurt Cobain mientras canta, como un Tom Sawyer del siglo XX… en su propio funeral.

Chubut, Natacha y después…

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En Alberdi, las historias de Silvio se dispersaron de un modo misterioso.

Primera hipótesis: En el bar de Santa Rosa y Chubut, un tipo oscuro y reservado refiere historias de músicos y delincuentes a los parroquianos de turno. Para hacer más verosímiles sus fábulas lleva consigo un estuche de guitarra y algunas veces se va sin pagar del recinto cuando el mozo se distrae.
Un día deja de ir, pero los borrachines siguen inventando historias y se las atribuyen todas a él. Sucede algo insólito: Alguien recopila las historias y las manda a distintas audiciones de radio firmando como un tal Silvio.

Segunda hipótesis: En el bar de Santa Rosa y Chubut un tipo solitario escribe sin parar unos manuscritos que no deja leer a nadie. Solo conversa lo indispensable con el mozo para pedir, pagar o preguntar la ubicación del baño. Un día se olvida de todo lo escrito sobre la mesa. No regresa nunca más.
El mozo deja los papeles sobre el mostrador, y la gente los lee cuando esta aburrida o los confunde con el diario.
Alguien los roba y los publica bajo el nombre de Silvio.

Tercera hipótesis: Natacha, la gitana, conoce en el bar de Santa Rosa y Chubut a un futuro escritor que se va a morir. El problema es que aún no ha escrito nada y le queda poco tiempo. Como ella ve todo lo que le pasa a todos, deja que se muera, escribe lo que él nunca va a escribir y lo pública con el seudónimo de Silvio.

Cuarta hipótesis: El bar de Santa Rosa y Chubut no existe.

Aristóbulo Pachevko – El antipotente del bailongo

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Aristóbulo – ¿Dónde dejé mis anteojos?

Ése que no ve nada, es Aristóbulo Pachevko, un hombre de edad media, políticamente incorrecto, alquimista, y miope. Recorrió paso a paso, tropiezo a tropiezo, cada rincón de su gabinete buscando sus lentes, hasta que de pronto...

Una bula para los internautas

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Después de una semana en la que el clima demostró ser bastante bipolar, se me hizo difícil encontrar un claro en el cual sentarme a degustar un porrón helado que haga contrapunto con un día caluroso.

Sólo un acontecimiento pudo darle valor a incurrir en estados alterados de conciencia: la celebración del aniversario del natalicio de nuestro compatriota Santiago “Polilla” Pfleiderer, quien coparticipó asado y choripanes como si estuviese a punto de lanzar su candidatura para las elecciones.

Durante la celebración, en un momento, la conversación derivó en si Aerosmith es rock o pop, y la guerra empezó con los cuchillos en la mano, enfrentamientos encarnizados, y con el rostro ensangrentado, el que subscribe gritó: ¡Por favor, no metan a los choripanes en esto!

La Cruz Roja ingresó en el quincho y se llevó los choripanes y un quilo y medio de bondiola de cerdo. La bondiola desapareció, lo cual compungió a los combatientes de ambos bandos, quienes salimos a rastrear la zona para recuperarla.

Llegamos a un falso campamento de la Cruz Roja, en el que había una flaco masticando un sánguche de bondiola mientras trataba de descargar un disco de Aerosmith desde el sitio de Taringa.

Mutantes – El humor sanguíneo

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Cuenta la leyenda que el buen humor es un privilegio de los administradores del ocio. Sólo los privilegiados que pueden llevar un ministerio ameno de sus vidas son capaces de sonreírle hasta al más puro portador de un rostro compuesto por dos esferas y una grieta.

Pero un hombre descubrió los músculos que levantan las comisuras de los labios... el día en que mutó.

El pasado inmediato de Natacha

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¿Y como es ver todo? ¿Se puede ver todo y traducirlo? ¿A quien le sirve?
Natacha clavo la vista en la esquina del cementerio de San Jerónimo, justo en la esquina en que alcance a ver a Silvio y me empezó a explicar.
-En principio es fácil, porque nadie sabe que le va a pasar, y empieza a trazar su destino a través de mis palabras, de lo que mis palabras dicen que va a ser su destino. ¿Se entiende? Pero con Silvio, las cosas fueron distintas. Era como recomendarle un libro a un condenado a muerte. ¿Qué libros leen los desesperados?¿Que libros le sirven?¿Como te imaginas vos la sala de lectura de un patíbulo?
-No tengo idea-dije.
-Bueno, eso también me pasó a mí. Sabía como iba a terminar todo, sabía la tragedia que se avecinaba….. Vi el incendio, vi la ira de Siconarcópolus, vi los nubarrones que oscurecían el horizonte. Pero por primera vez en mi vida, no sabia que decirle a alguien sobre su propio destino, porque en realidad, Silvio también lo sabia, es decir… lo había escrito, a su manera lo había profetizado. ¿Cómo yo iba a ser tan torpe de poner sobre el regazo de un condenado su propia novela?
-Entonces ¿Qué hiciste?- pregunte desesperado.
-Le di amor – dijo Natacha.
-¿Cómo amor?- repregunté estúpidamente.
-Le dí…..amor….Si de todas formas nos vamos a morir, nos vamos a morir contentos.